Angustiado, un discípulo acudió a su maestro y le preguntó:
-¿Cómo puedo liberarme?
El instructor contestó:
- Amigo mío, ¿y quién te ata?
La mente es amiga o enemiga. Aprende a subyugarla.
La vida no se mide por las veces que respiramos... sino por los momentos que nos dejan sin aliento
4 comentarios:
Acabo de leer en un blog: "¿Estamos huyendo de algo? ¿Conocemos nuestro lado oscuro?"
En mi caso, siempre huyo de algo, sobre todo, de la responsabilidad de mis actos. Quizá, sólo quizá, ése sea mi lado oscuro.
No lo voy a volver a hacer, jamás.
No, no lo hagas. Huir, nunca. Destierra el miedo de tu vida, pues todo es posible, incluso aquello que más deseas. Ojo al deseo, que puede hacerse realidad.
La mente es tendenciosa, siempre esta esperando y deseando algo, y ese afán de conseguirlo es lo que impide tenerlo.
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