domingo, 26 de agosto de 2012

Mapa y territorio

Más sencillamente, sin duda se dejó arrastrar por una pura fascinación plástica ante la imagen de aquellos bloques de texto ramificado, empalmados, que se engendraban unos a otros como un pólipo gigantesco.
("El mapa y el territorio", M. Houellebecq)


Es poeta, ensayista y novelista y ha llegado a mis manos por casualidad, como todas las cosas buenas de la vida.
Quizás suene más el siguiente título "Las partículas elementales" que, junto a "Ampliación del campo de batalla" y "Plataforma", forman un tratado sobre la condición humana de nuestro tiempo.
Me está sorprendiendo su autodescripción, en la que no sale muy bien parado que digamos. Sin embargo, sí se recrea en su condición de prestigioso escritor.
Una gran novela.